HadVentu/Zignha

Zemélesiz Qallaiens Miér Jul 04, 2012 8:10 am

Qamenuza

Despierto entre negros pesares;
los soles hermosos raidos del infinito,
gritan y gimen en tormentos indescifrables.
¡Soy el responsable de estas atrocidades!

A veces les veo jugar en sueños,
inocentes del designio verdadero,
cantando en momentos y momentos;
los ecos de sus voces las tritura el tiempo.

Múltiples espectros vestidos de negro.
Nunca dejan de atormentar,
a un mortal ajeno a los vivos,
un inmortal proscrito por los muertos.

Somnoliento por sus lívidas fragancias;
acariciado por sus puntiagudos dedos.
En torno un etéreo matiz crepuscular
libre del sol, libre de ellos.

Nunca recordaran mis servicios,
les otorgo sin costear un lecho;
ajeno de los demás obreros marchitos…
¡Yo reino en este valle maltrecho!

Mis pequeños indefensos:
¡soy un guardián imperfecto!
custodio la paz de sus cuerpos,
preservo su vida al infierno.

Las auroras saludan mis siglos;
en vilo me duermo en silencio,
nadie pronuncia mí nombre secreto.
Mi memoria lo ha olvidado en su desprecio

Solo mis queridos retoños
injertados sobre vidas consumadas,
inmutables me siguen gimiendo.
Mis milenios solo han sido tormentos.

Esta noche fantasmal;
mientras los espectros insultan al silencio,
invocare la fuerza abisal
de innombrables seres muertos.

Ni el fuego del infierno,
ni sus más prontos esfuerzos,
evitaran el ímpetu anhelo,
de liberar mis amados del tormento.

Vestido de un ser espectral,
recobro mi identidad perdida;
escribo en un nocturno velo otoñal
mi nombre con furia ardida.

“Tristes señores de las Tierras;
cumplo con mi misión ancestral.
Nunca naci para sus cuerpos cuidar,
solo por estos soporte su maltrato.
Ahora unidos correremos hacia el prado
donde naceremos en terreno olvidado
y nunca jamás seremos esclavos
en aquel lugar seremos amados”

La llama incontenible surco las tierras
y miles de soles retornaron a las estrellas…
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